La Revista de Estudios Culturales Urbanos, Bifurcaciones, es toda una referencia en la discusión y el diálogo teórico sobre las ciudades desde 2004. En 2013 echan a andar su proyecto editorial con un objetivo innovador: explorar entradas múltiples a los fenómenos urbanos. En ese contexto vienen a ofrecer la traducción (por Alejandro Rascovan) del texto en francés de Alain Musset, titulado, Star Wars. Un ensayo urbano-galáctico, que cuenta con 214 páginas, nutridas de abundantes referencias visuales tanto de los filmes como de los comics de la saga. Musset es geógrafo y un destacado profesor de la EHESS-Ecole des hautes études en sciences sociales. Su ámbito de estudio general es la “geografía social”, que entre otras cosas le ha permitido observar las carencias y virtudes del desarrollo urbano latinoamericano. De facto, existe una relación cercana con Chile materializada a través de conferencias y trabajo de investigación en terreno. Otra de sus líneas de trabajo, más específica, corresponde a la llamada “geo-ficción”, cuya propuesta metodológica traslapa dos planos de análisis: (i) la geografía y (ii) las imágenes de ficción que proponen los medios audiovisuales como el cine. Estas son las coordenadas que enmarcan este libro.
El texto conjuga dos mundos. Por un lado, la reflexión urbana proveniente de la sociología y la geografía, que observa los cambios y transformaciones históricas del territorio al que denominamos ciudad, y que viene a dar contexto a todas las relaciones sociales posibles entre sus habitantes. Por otro, la observación de la representación del orden urbano que ofrecen las imágenes de Star Wars, con foco en la imaginada ciudad-planeta de Coruscant, que como apunta Musset (2018) sufre los efectos del cambio político en tanto capital de la Antigua República en origen, y luego Centro Imperial, dato que resume una trama clásica entre el bien y el mal. Bajo ese esquema el autor organiza convenientemente el texto en cinco partes, más una introducción titulada “Ciudad imaginaria y modelo urbano”. Estas son: 1. Coruscant, ciudad global y capital galáctica; 2. La megalópolis planetaria; 3. Disparidades espaciales y segmentación vertical; 4. Los mil fragmentos de una ciudad imposible; y 5. Conclusión: muerte y transfiguración de Coruscant. El ensayo demuestra un calado teórico significativo sobre el fenómeno urbano (que abarca desde esa reserva ética del espacio público y la escala barrial que es Jane Jacobs, hasta la discusión socio-histórica sobre el “derecho a la ciudad” de Henri Lefebvre, pasando por Manuel Castells o Abraham Moles, entre otros) y un conocimiento erudito del contexto urbano de Star Wars, fenómeno de la cultura popular de masas que surge de la mano de George Lucas en 1977 y que como señala Musset produce “imágenes, modelos y arquetipos de una sociedad muy ‘americana’ y muy ‘mixta’” (p.7).
Así, como si de dos paños gigantes se tratase, va dando puntadas entre las múltiples representaciones de una ciudad ficcionada, y ciertos modelos sociales que intentan dar respuestas a las complejidades que suponen los grandes ordenamientos urbanos en la realidad terrícola. Capítulo a capítulo el autor va uniendo las costuras entre dichas dimensiones, estableciendo los argumentos que respaldan el punto de vista con el que observa un objeto de estudio singular y heterogéneo, a ojos de las ciencias sociales más clásicas, y que abarca desde el universo cinematográfico, pasando por los libros y las novelas gráficas, hasta los videojuegos.
En la introducción, Musset plantea una duda metodológica que es central: ¿es posible establecer una relación virtuosa y fructífera entre la representación imaginaria de una ciudad y un modelo urbano proveniente de la realidad material? Como se espera, y a modo de respuesta, el texto va dando cuenta de trazas tipológicas similares a las de una “ciudad global” (Sassen, 1991) que habitan en las representaciones del espacio público de Coruscant. Porque el autor decide estudiarla como si existiese (p.11), atendiendo a una cuestión fundamental en la observación urbana: la escala. De la vivienda al barrio, del barrio a la ciudad, y de la ciudad a la ciudad-planeta (escala planetaria). A mayor escala, mayores problemas estructurales y sociales, y las imágenes que propone el universo de Star Wars lo van reafirmando, muchas veces transformadas en citas a São Paulo o la isla de Manhattan en Nueva York, como elevados ejemplos de metrópolis, megalópolis o megapolos. Musset está repensando la pregunta sobre las representaciones y el punto de vista del investigador al enfrentarse a este tipo de objeto de estudio. En suma, reflexiona sobre cómo es percibida la ciudad contemporánea aplicando las imágenes y discursos desarrollados por la ciencia ficción (p.12). Sin duda un tema tan serio como relevante en la era de la producción y auto producción global de representaciones, parafraseando a Manuel Castells (1989), alguien que también sabe de ciudades globales, informacionales y nodos de control al estilo Coruscant.
Pero es la categoría urbana de “ciudad global” de Sassen (1991) la que cruza toda la obra. Desde la estructura que incluye lugares de poder simbólico y centros de comando y flujo del ordenamiento económico, hasta la configuración de un tejido social particular, diverso y cosmopolita −nunca mejor dicho− que diferencia por clases sociales y atrae a millones en búsqueda de trabajo. Es una civilización vertical y completamente urbanizada cuyas patologías muestran la ausencia total de espacios naturales, la nula capacidad de carga del territorio (con la consecuente contaminación), la densidad de la vivienda, la dispersión urbana (urban sprawl, como expresión urbana norteamericana), la desigualdad y exclusión social. El lujo, arriba. El pobre, abajo. Una ciudad fragmentada (Marcuse, 1995) en vertical, conformando barrios étnicos y cerrados. Nada muy distinto a la realidad en ciertas ciudades del mundo. Tal como señala el autor, ya como conclusión, la representación urbana en Star Wars parece estar apuntando a una sentencia-alerta: la “ciudad global”, en tanto modo de vida, no tiene sentido si el tejido social está excluido y confinado a espacios cerrados sobre sí mismo (p. 207). Aunque hay otra lectura posible que tiene que ver con la reivindicación del espacio público, y, por lo tanto, de la idea que las representaciones cinematográficas proponen sobre lo público en este caso.
Lagos-Olivero., C. (2020). Star Wars. Un ensayo urbano-galáctico, laFuga, 23. [Fecha de consulta: 2024-11-21] Disponible en: http://2016.lafuga.cl/star-wars-un-ensayo-urbano-galactico/970